Recuerdo recuerdito...

Hay cosas que se quedan grabadas en la memoria "pa los restos"... ayer, por cuestiones que no vienen al caso, me vino a la memoria una de ellas y ahora no se me va de la cabeza, me rio, porque es absurda, pero no se me va...

De esto hace ya... mas de veinte años (joder, que viejo me acabo de hacer de golpe!), no se la edad que tendría pero que andaba en EGB, en los primeros cursos, es un hecho ya que ocurrió en el colegio y en el aulario de los primeros cuatro cursos de EGB. Si bien siempre he sido un alumno normal, ni he dado la tabarra ni he visitado el despacho de la directora ni me han dado medalla alguna (bueno, relamente medalla no porque las monjas no daban medallas).

El caso es que andaba yo "moneando" con mis tijeras "con punta" (¿A que edad te dejan llevar tijeras "con punta" al cole?) en la clase de plásica mientras la profesora explicaba algo en la pizarra. ¿Como se "monea" con unas tijeras? Pues una de las opciones, la que yo escojí, era hacer rodar la tijera en mi dedo índice... vueltas y vueltas y vueltas... pero como todo en esta vida, las vueltas se acaban, se acaban en el momento en que las tijeras se deslizan de mis dedos y salen volando por la ventana que estaba abierta y caen "al vacio" desde un primero... - nooooOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!! - en ese momento de desconcierto se me ocurre la idea de que igual pasa alguna de las monjas y se le clava en la cabeza la tijera, SE LE CLAVA EN LA CABEZA!!
Joder! ¿Que clase de niño que va a un colegio de monjas pretende agredir a una miembra (ahora se puede usar este término, miembra, ¿no? jajajajajaja) de la congregacioon? Esos van al infierno de cabeza sin pasar por el purgatorio fijo!!!

El caso es que no era una imagen alarmista, al menos no mas allá de suponer que subiría la monja con la tijera en la cabeza clavada perguntando de quien era el arma arrojadiza... momento de descontrol, caos mental y agobio... ¿que hago? ¿que hago? ¿¿que hagooooo??
No hagas nada, sidimula, nadie te ha visto, haz como que prestas atención...

Ciertamente no pasó nada y lo que hice fue buscar las tijeras (que ya no estaban) al salir al patio y decir en casa con cara angelical "mami, no se donde están las tijeras, se han perdido" (¿que alternativa tenía? No iba a confesar mi intento de agesión involuntaria a una monja inocente).

Las cosas como son, me pasé soñando una semana que subía una monja con unas tijeras en la cabeza buscando al responsable de "monjicidio".



PD.- Si, que pasa? ¿En tu colegio no habían palmeras? En el mio predominaban las moreras, pero palmeras habían (y hay) unas cuantas.